¿Quien dijo que el supermercado es apto para todos?

Cuando la comida escasea en mi alacena entonces es hora de ir al supermercado.
Estando ahí, primero la fruta, tomates, lechuga, luego el pan, corn flakes, café, té rojo, nesquick, patatas, pollo, carne, salchichas, pasta, huevos, queso, jamón, chaca, yogurts, salchichas, pasta de dientes y adiós.
Estando en la cola me percate de algo bien divertido: había ahí dos hombres comprando comida. Lo gracioso del tema no era eso, si no que uno de ellos había cogido un yogurt de cada marca para 'probarlos'. Él bien feliz decido a pagarlos. Por lo visto siempre había hecho eso y...10 minutos la señora de la caja, muy amable, le explicaba que el pack de 4 yogurts se cobraba entero, aunque él llevara sólo uno. Y el bicho, hombre tenía que ser (sin ánimos de ofender a nadie), no le entendía. Bueno, a todo esto atrás una gran cola sólo de mujeres. Y una abuela, como aquí son bien sinceras, sólo gritaba:

-Cobrales, si son chicos. No se enteran de nada.

Yo atacada del chiste. ¿Quién dijo que el supermercado era apto para todos? Para esos dos amigos sí que no era apto. Y todavía el bicho dice:

-¡Ah!, ya decía yo por qué me salían tan altas las cuentas de súper.

Y ni les contaré las maravillas que llevaban en la carretilla...