Wednesday, August 20, 2008

El mismo, a la misma hora, en el mismo transporte

Al principio, una ciudad tan grande como "la capi" española me asustaba por el hecho de que cuenta con una red de metro bastante potente. Pensé que era imposible encontrarse a alguien todos los días, ya que todos vamos tan rápido que ni nos fijamos en nadie ni en nada. Me equivoqué. Al menos, llevo aproximadamente 6 días encontrándome al mismo "viejito" que va escuchando música, con sus headphones negros, con su chal de color rojo, bajito, encorvado, que sonríe, camina súper rápido, y desde hace tres días nos saludamos. Y es que además, coge el mismo vagón que yo (suele ser el primero). Es súper gracioiso el asunto, pero alegra el día. Conincidimos a la misma hora, en el mismo tren y haciendo lo mismo: él escuchando música y yo leyendo. A ver si un día de estos me animo a preguntarle cómo se llama. Me encanta cuando me sonríe y se va rápidamente a coger cercanías.

Friday, August 08, 2008

Proyecto Nestea

La gente que me conoce sabe mi lema de decir que soy "perfecta". La verdad es que mi autoestima es alto, en muchos casos. Por esta razón, cuando vi esta campaña televisiva de Nestea me sentí súper identificada con el producto. Dejo aquí el spot. Y es cierto: soy una mujer perfecta en este mundo imperfecto hehehe.

Thursday, August 07, 2008

Una mujer exquisita

De normal no soy partidaria de leer las cadenas que mandan a mi mail. Esta, como siempre pasa, es la excepción. Ahí les va.

EL DULCE SABOR DE UNA MUJER EXQUISITA
(Gabriel García Márquez)

'Una mujer exquisita no es aquella que
más hombres tiene a sus pies, si no
aquella que tiene uno solo que la hace
realmente feliz. Una mujer hermosa no
es la más joven, ni la más flaca, ni
la que tiene el cutis más terso o el
cabello más llamativo, es aquella que
con tan sólo una franca y abierta
sonrisa y un buen consejo puede
alegrarte la vida. Una mujer valiosa
no es aquella que tiene más títulos,
ni más cargos académicos, es aquella
que sacrifica su sueño temporalmente
por hacer felices a los demás. Una
mujer exquisita no es la más ardiente
(aunque si me preguntan a mí, todas
las mujeres son muy ardientes...Los
que estamos fuera de foco somos los
hombres) sino la que vibra al hacer el
amor solamente con el hombre que ama.
Una mujer interesante no es aquella
que se siente halagada al ser admirada
por su belleza y elegancia, es aquella
mujer firme de carácter que puede
decir NO. Y un HOMBRE........UN HOMBRE
EXQUISITO es aquel que valora a una
mujer así..............Que se siente
orgulloso de tenerla como
compañera.... Que sabe tocarla como un
músico virtuosísimo toca su amado
instrumento..... Que lucha a su lado
compartiendo todos sus roles, desde
lavar platos y atender tripones, hasta
devolverle los masajes y cuidados que
ella le prodigó antes...La verdad,
compañeros hombres, es que las mujeres
en eso de ser 'Muy machas' nos llevan
gran recorrido...¡Qué tontos hemos
sido -y somos- cuando valoramos el
regalo solamente por la vistosidad de
su empaque... ¡Tonto y mil veces tonto
el hombre que come mierda en la calle,
teniendo un exquisitito manjar en
casa.


Tuesday, August 05, 2008

Hace tanto, tanto, tanto...

Ni siquiera puedo recordar el tiempo exacto desde la última vez que decidí escribir en mi blog. Sé que con sólo consultar la fecha de la última entrada todo quedaría solucionado pero prefiero no hacerlo. Eso de delatarme en público no va conmigo.
Muchas cosas han sucedido desde ese entonces. Intentaré resumir las aventuras de esta bichita aquí en España.

Ah sí…creo que una de las últimas veces que escribí aquí fue a principios de año. Pues nada, ahí comenzaba mi último semestre de Universidad. Las cosas se fueron dando bastante más rápido de lo que pensaba: el tiempo nunca juega a nuestro favor, la única arma que nos queda es la memoria y los buenos recuerdos de esos tiempos de universitaria que jamás olvidaré.

Después de un primer semestre lleno de fiestas, el segundo semestre más nos valía estudiar. En mi piso las cosas fueron bien, nada relevante que contar. Así, pasó enero y sus exámenes, febrero, marzo, abril, mayo y junio. Lleno de miles de proyectos de televisión, de sueños y de aventuras, de notas, de alegrías y tristezas, incluso de puteadas…me adentré al mundo de las redes sociales (tengo perfil en Facebook y en Tuenti) y al final pude sobrevivir. También a principios del 2008 conseguí hacer algo que, ahora, puedo decir que es real: me enamoré de nuevo (eso es otro cuento). Así pasó el tiempo y me dispuse a abandonar mi casa, mi vida de universitaria. Varia gente se marchó de mi vida, mucha gente aún queda por despedirse (dolor en mi alma). Todas ellas y ellos, con los que he compartido estos 5 años son lo mejor que me han pasado aquí, son mi familia…odio ponerme melancólica pero así es. Si me pusiera a enlistarlos no terminaría nunca. Lo que me consuela es que sé que en algún momento de la vida los volveré a ver, y además, están en mi corazón así que siguen conmigo. Lo he asumido: hay cosas que no se pueden evitar.

Los comienzos de mi vida laboral. Tuve varias entrevistas de trabajo antes de decidirme por una. Creo que he tomado la decisión más acertada –por el momento-. Y así, es como me mudé a Madrid. Al terminar la Universidad me fui a Suecia (lugar de origen de mi amor) a pasar unos días de vacaciones. Yo iba tan “pancha” ya que no tenía donde vivir en la capital española, pero por lo menos tenía compañeras de piso…esencial, ¿no? Al volver por suerte sí tenía “casa”. Ese lugar es horrible, es un piso viejísimo, con bichos, asqueroso: lo odio. Pero era eso o la calle. Lo que más me dolía es que estaba pagando más por ese sitio que mi piso bellísimo de Pamplona. Uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde. Ahora me dedico a la “consultoría”. Menudo cambio, justo cuando España entra en recesión económica. La suerte de los principiantes.

In memoria: extraño mi casa en Pamplona, pero principalmente extraño mis vacaciones en Sibar. Extraño mi vida de Universitaria, pero principalmente mi vida de “juerga” con mis amigos más queridos. Extraño a mi familia, a todos por igual; extraño a los desocupados, mucho muchísimo…extraño mi pasado. Quiero regresar, pero no puedo. Lo sé. Dicen por ahí que “para atrás ni para agarrar impulso”. A hacerle webos en esta aventura madrileña. La única salida es escapar a Pamplona las veces que pueda y descansar un rato en mi segunda ciudad.